UNMISS y el gobierno se unen para luchar contra la violencia de género

Clip de Prensa Fuente: Radio Tamazuj
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En Sudán del Sur, la nación más joven del mundo, la violencia contra las mujeres y las niñas se utiliza a menudo como arma de guerra, escribe Peter Bateman de UNMISS.

A medida que el país comienza su transición democrática comenzando a redactar su constitución permanente y preparándose para las próximas elecciones en 2024, queda mucho por hacer para prevenir la violencia sexual y de género.

Por lo tanto, la Misión de las Naciones Unidas en Sudán del Sur (UNMISS) se ha asociado con socios humanitarios y organismos gubernamentales en Unity State para formar lo que se conoce como el subgrupo de violencia de género (GBV).

Esta alianza comprometida tiene como objetivo crear conciencia entre las comunidades sobre la necesidad apremiante de poner fin a cualquier forma de violencia contra las mujeres.

Con este fin, se creó una política operativa estándar para mejorar las respuestas a las mujeres que han sido víctimas de violencia en los siete condados del estado.

Sin embargo, a medida que la dinámica del conflicto cambia y se vuelve más compleja, los documentos de política también deben evolucionar para reflejar las realidades sobre el terreno.

Por lo tanto, los días 8 y 9 de mayo, la UNMISS, el Ministerio de Género, Infancia y Bienestar Social del estado y el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) realizaron un taller dedicado a actualizar los marcos existentes para prevenir y responder a cualquier forma de violencia perpetrada contra mujeres y niñas. .

Mientras las participantes deliberaban sobre las formas de garantizar un Sudán del Sur más seguro para las mujeres, se olvidaron del calor intempestivo y del tukul (choza de barro) marcado por el conflicto donde estaban sentadas. Estaba claro que el tema en cuestión importaba a todos.

Según Bakhita Steven de Nonviolent Peaceforce, una organización no gubernamental internacional dedicada a la protección de los civiles, la violencia de género requiere un enfoque que abarque a toda la sociedad, donde las transformaciones se produzcan cambiando los corazones, las mentes y las culturas existentes que afectan negativamente a las mujeres y las niñas.

“Tenemos leyes muy buenas en Sudán del Sur que se supone protegen los derechos de las mujeres, el problema es su cumplimiento”, reveló.

“La comunidad también tiene un papel fundamental que desempeñar, especialmente en cuestiones como los matrimonios forzados o precoces y la dote, siendo este último un factor clave de la violencia doméstica. Es hora de que las mujeres de Sudán del Sur sean vistas como miembros valiosos y económicamente productivos de la sociedad en lugar de una fuente de ingresos para las familias”, afirmó apasionadamente.

Redactada inicialmente en 2018, la política discutida en esta plataforma ha sido actualizada periódicamente para seguir siendo sólida y adaptable al panorama en constante cambio de la violencia de género.

Sirve como una guía detallada, que describe las funciones y responsabilidades de cada parte interesada y refuerza un marco integral para eliminar todas las formas de violencia contra la mujer.

Esto es especialmente crítico dado que el proceso de paz en curso en Sudán del Sur se encuentra en un momento delicado en el que la participación plena e igualitaria de las mujeres es esencial para garantizar que los logros de la paz sean sostenibles.